En la hermosa ciudad amurallada de San Francisco de Campeche abrirá próximamente el primer museo de arqueología subacuáticade nuestro continente, en un espacio de 600 m2 los visitantes tendrán la oportunidad de «sumergirse» virtualmente en un viaje a través del tiempo que los llevará hasta unos 10 mil años atrás, en la era del Pleistosceno.
El Museo San José el Alto, cuenta con 426 piezas cuidadosamente seleccionadas, que junto con un excelente guion museográfico y la curaduría experta de Helena Barba Meinecke, especialista en arqueología subacuática del INAH, permitirá una experiencia inmersiva que se complementa con proyecciones interactivas hápticas.
Uno de los elementos más especiales de este museo es el rescate de un cargamento de esmeraldas del arrecife Alacranes, que es el más importante del mundo fuera de Colombia, estas piedras preciosas fueron localizadas hace tres años y su rescate comenzó en el año 2015.El museo cuenta con seis salas de exhibición, la primera de ellas está dedicada a dónde podemos encontrar arqueología subacuática, sitios como ríos, lagunas, mares, cuevas inundadas, manantiales, lagos y cenotes llevan en sus profundidades testimonios encapsulados de otros tiempos.
La segunda sala será dedicada a los restos de megafauna hallados en la Península de Yucatán, también se encontrará en exhibición el esqueleto de la mujer más antigua de América llamada Naia quien tendría unos 12 o 13 mil años de antigüedad. La sala tres contará con las ofrendas que hicieran los mayas a sus deidades y que eran depositadas en los cenotes, los interactivos hápticos permitirán a los visitantes sentirse esos espeleobuzos que van recuperando las piezas para poderlas exhibir en el museo.
En la sala cuatro se encontrarán piezas del siglo XVI como el cañón «media culebrina» fundido en 1552, que es un emblema para los campechanos junto con otras piezas de la época que han sido recuperadas en distintos puntos del litoral de Campeche y en sus abundantes ríos. La sala cinco está conformada por piezas de los siglos XVII y XVIII en ella se encontrará el cargamento de esmeraldas recuperado del Arrecife Alacranes, también el Ancla Macuca, llamada así por la cantidad de monedas macuquinas que tenía pegadas, este tipo de monedas se acuñaban de forma manual a golpe de martillo y eran sumamente irregulares, pero muy populares en esa época. En esta sala se encuentra una valiosísima colección de objetos fabricados en oro, son más de 200 piezas de diferentes manufacturas que están resguardadas por vitrinas de alta seguridad y videocámaras de vigilancia.
Por último, la sala seis contiene restos de dos naufragios ocurridos en los siglos XIX y XX, y el enfoque de esta sala está en la conservación que debe hacerse de este patrimonio, procurando hacer conscientes a los cazadores de tesoros que el equilibrio del medio ambiente que rodea los pecios, es responsabilidad de todos.