Luego de declararse culpable de los delitos de lavado de dinero y asociación delictuosa, a cambio de obtener una reducción en su condena, un juez de Control de la Ciudad de México sentenció a nueve años de prisión al exgobernador de Veracruz Javier Duarte. También le impuso una multa de 58 mil 890 pesos y una amonestación verbal para que no reincida en este tipo de delitos, y ordenó el decomiso de 40 bienes inmuebles que están a su nombre.
El juez decidió no fijar una reparación del daño, pues los delitos que se le imputan son de carácter formal y no generan alteración material.
“Por un principio de lealtad e institucionalidad que rige mi conducta sí la admito (su culpabilidad)”, respondió Duarte cuando el juez le cuestionó si aceptaba la responsabilidad por los delitos señalados.
En una audiencia que inició alrededor de las 4 de la tarde, Marco Antonio Fuerte Tapia, juzgador del Centro de Justicia Penal Federal con sede en el Reclusorio Norte, especificó que debido a que el exmandatario aceptó llevar su procedimiento de manera abreviada, conforme al Código Nacional de Procedimientos Penales, la pena de prisión que le impuso no podrá ser sustituida por ningún beneficio.
No obstante, explicó que de los nueve años de prisión a los que fue condenado, se deberá descontar el tiempo que ha permanecido privado de su libertad; es decir que su encarcelamiento empezó a contar desde el 15 de abril del 2017, por lo que únicamente pasará en prisión siete años y medio.
Duarte aún tiene dos procesos abiertos, promovidos por la Fiscalía de Veracruz en su contra, y por los cuales se le dictó la medida cautelar de prisión preventiva.